lunes, 19 de mayo de 2008

"La canción del pirata"

Promusicae pidió al gobierno la semana pasada que desconectara a todos los internautas que bajen música de la red. Recuerdan que la piratería es un delito, algo que no es cierto, puesto que LUCRARSE con la piratería sí es un delito pero realizar copias para propio uso no lo es. Además, hemos de recordar, que cada vez que compramos un disco duro, un mp3 o un cedé estamos pagando el canon digital aunque el cedé lo vayamos a utilizar para meter las fotos de las últimas vacaciones. Primero pagas y después preguntan.
Es la ley del "por si acaso" que ya se va extendiendo a otros productos.
La semana pasada fui a comprar un cuchillo cebollero, costaba 3.00€ para al pagar me dijeron que eran 3.20€, cuando pregunté extrañada me contaron lo del canon por asesinato. Resulta que los fabricantes de cuchillos cebolleros habían realizado un estudio y un 0.35% de los compradores lo utilizan posteriormente para asesinar o intentar asesinar con ellos y que, en previsión de posibles demandas de las víctimas habían decidido incrementar su precio con un canon, claro que no todo el mundo utilizaba los cuchillos para asesinar pero ¡¡no iban a pagar los fabricantes los costes de posibles demandas pudiendo pagarlos el resto de consumidores!!
Y la verdad, todo esto me está empezando a poner nerviosa porque recuerdo las veces que tuve que repetir en voz alta "La canción del pirata" de Espronceda y me da miedo que un día llamen a mi puerta para pedirme una pasta por derechos de autor.

1 comentario:

Mafalda dijo...

También podría el gobierno quedarse un 60% de lo que cobra los que sin ser músicos se forran gracias al talento de otros. Que egoista, estos comentarios siempre me recuerdan un patético programa de televisión en el que el impresentable de Bustamente, con todo lo que gana, humillaba públicamente a un pobre boliviano en la calle porque vendía copias de su cedé. Al muy capullo no le daba vergüenza pensar en su cuenta corriente, y se atrevía a decirle al otro pobre que se pasa todo el día de aquí para allá cargado para que no lo detenga la policía, que no tenía vergüenza y que por culpa de gente como él, los artistas perdían mucho de dinero. Dios! ¿Alguien ha oido hablar de justicia social?.